Frasezaca del día

En un beso, sabrás todo lo que he callado.
Pablo Neruda.

lunes, 31 de mayo de 2010

¿Qué quieres ahora? (Febrero I)

Era una mañana como cualquier otra. Dormido, como drogado; de pronto un fino hilo de luz encontró el hueco preciso para colarse como quien entra en una fiesta sin haber sido invitado. Una vez dentro, golpeó como un ariete el párpado izquierdo, lo que le hizo fruncir el ceño, y con esfuerzo, despertar. Está sudado, no ha sido una buena noche. Su cabeza lleva tiempo sin encontrarse a sí misma, y las dudas llevan tiempo robándole el sueño. Sin ganas de abandonar la cama, busca el interruptor de la lámpara en forma de esfera que tiene sobre la mesilla. Lo pulsa sin obtener el resultado esperado: la lámpara no se enciende. Comprueba que esté conectada al enchufe y efectivamente, ese parece no ser el problema, así que opta por levantarse y a trompicones avanza hasta la persiana. Le parece curioso que a pesar de tener más orificos por los que podría entrar la luz, es el haz que le ha despertado, el único que entra a la habitación. Levanta en apenas dos empentones la persiana y comprueba que todavía es de noche. Su nuevo amigo luminoso resulta provenir de un punto concreto, como si alguien lo hubiese dirigido hacia su casa con la intención de llamar su atención.
                                                                     
                                 * * * *

Han pasado ya varios meses desde aquel desencuentro. Desde entonces Febrero ha estado vagando perdido, preguntándole al aire el motivo de su castigo. Y después de tanto insistir llegó el momento de las respuestas. No ve a nadie, solo oye. Una voz tan parecida a la suya que le incomoda. Un día las respuestas le arrancan una sonrisa para que al llegar el siguiente, las ilusiones se quiebren, como una tela de araña. Tan costosa de tejer y tan frágil. Lleva tiempo repitiendo esta situación y la cordura parece cansarse poco a poco de vivir con él.

                                 * * * *

Sin apenas proponérselo, entornó los ojos buscando el origen del rayo despertador. Intentó no cerrarlos del todo, pero cuando en un despiste los cerró completamente y parpadeó, se encontró con una apabullante oscuridad. No es la primera vez que "él" le visita. Febrero empieza a creer que solo aparece para enseñarle lo fugaz que es. Le saca de su letargo, le despierta, le llena de energía y cuando acude a su llamada; desaparece.

                                 * * * *

Lleva un tiempo sin visitarle, pero Febrero no le ha echado en falta. Está tranquilo, con sus penas pero estable. Sin altibajos que le derrumben su volandera tranquilidad. Disfruta lo que tiene, lo que le queda y afronta cada uno de los males que encuentra al caminar. Comienza los días al alba y los finaliza al llegar el ocaso, como cualquier hijo de vecino. Nunca se ha considerado especial y ahora por fin es uno más. Pero volvió. En el fondo no quería encontrarle de nuevo, atravesando su persiana, pero siempre la dejaba un poco abierta. Lo justo para que él avisase si le visitaba de nuevo. Y así lo hizo. Regresó, se adentró y le rompió, una vez más, el sueño. Pero esta vez es distinta. No ha sido como siempre, como él esperaba. Febrero solía levantarse de un salto, buscándolo ansioso, excitado por la visita y con brillo de ilusión en sus ojos recien abiertos. Pero esta vez... Se limitó a levantarse, acercar su mano a la cinta de la persiana, asiéndola con fuerza tiró hacia su pecho, y a la vez que la soltaba con brusquedad preguntó gritando: ¿Qué quieres ahora?

lunes, 24 de mayo de 2010

371 páginas de viaje a la locura.

Ayer mismo terminé de devorar el libro que, ya hace un tiempo, presentó Roberto Iniesta, alma máter de Extremoduro. Y digo devoré, porque aunque él dice que es un libro para leer despacio, a mi me ha enganchado desde el principio. Algo que, por otra parte, no implica que no haya disfrutado de las palabras. Aun a sabiendas de la grandeza de Robe a la hora de encontrar a cada palabra su pareja perfecta, he disfrutado enormemente y he sacado del letargo a mi imaginación. Ha desatado mi apetito de letras y ha sido como si día tras día necesitase mi ración, aunque fuese la justa para matar el hambre literario.


Me ha sorprendido gratamente, como hace Robe cada vez que le veo hablar en algún medio, cada vez que escucho una de sus canciones, leo una de sus letras u oigo una de sus frases. No voy a contar absolutamente nada del argumento del libro. Únicamente os recomiendo encarecidamente su lectura y para abrir boca os dejo la entrevista que ofreció para la presentación, de la que, como váis a poder observar, pueden sacarse grandes comentarios del autor.




Es admirable el realismo y la humildad con la que cuenta que ha podido publicar el libro por ser quien es, y que en caso contrario no habría sido posible. Sea como sea, me alegro de que haya sido así y haber podido disfrutar de su lectura. Una vez más, gracias.

viernes, 14 de mayo de 2010

Aprenderás.

Hoy quiero recomendaros un minuto de lectura de un grande: Sir William Shakespeare.

Después de algún tiempo aprenderás la diferencia entre dar la mano y socorrer a un alma, y aprenderás que amar no significa apoyarse, y que compañía no siempre significa seguridad.
Comenzarás a aprender que los besos no son contratos, ni regalos ni promesas. Comenzarás a aceptar tus derrotas con la cabeza erguida y la mirada al frente, con la gracia de un niño y no con la tristeza de un adulto y aprenderás a construir hoy todos tus caminos, porque el terreno de mañana es incierto para tus proyectos y el futuro tiene la costumbre de caer en el vacío.
Después de un tiempo aprenderás que el sol quema si te expones demasiado. Aceptarás incluso que las personas buenas podrían herirte alguna vez y necesitarás perdonarlas. Aprenderás que hablar puede aliviar los dolores del alma. Descubrirás que lleva años construir confianza y apenas unos segundos destruirla y que tú también podrás hacer cosas de las que te arrepentirás el resto de tu vida.
Aprenderás que las nuevas amistades continúan creciendo a pesar de las distancias, y que no importa qué es lo que tienes, sino a quién tienes en la vida, y que los buenos amigos son la familia que nos permiten elegir.
Aprenderás que no tenemos que cambiar de amigos, si estamos dispuestos a aceptar que lo amigos cambian. Te darás cuenta de que puedes pasar buenos momentos con tu mejor amigo haciendo cualquier cosa o simplemente nada, solo por el placer de disfrutar su compañía.
Descubrirás que muchas veces tomas a la ligera a las personas que más te importan y por eso siempre debemos decir a esa persona que la amamos, porque nunca estaremos seguros de cuando será la ultima vez que la veamos.
Aprenderás que las circunstancias y el ambiente que nos rodea tiene influencia sobre nosotros, pero que nosotros somos los únicos responsables de lo que hacemos. Comenzarás a aprender que no nos debemos comparar con los demás, salvo cuado queramos imitarlos para mejorar. Descubrirás que lleva mucho tiempo llegar a ser la persona que quieres ser, y que el tiempo es corto.
Aprenderás que no importa dónde llegaste sino a dónde te diriges y si no lo sabes cualquier lugar sirve.
Aprenderás que si no controlas tus actos ellos te controlan y que ser flexible no significa ser débil o no tener personalidad, porque no importa cuan delicada y frágil sea una situación: siempre existen dos lados.
Aprenderás que héroes son las personas que hicieron lo que era necesario enfrentando las consecuencias.
Aprenderás que la paciencia requiere mucha práctica. Descubrirás que algunas veces, la persona que esperas que te patee cuando te caes, tal vez sea una de las pocas que te ayuden a levantarte. Madurar tiene más que ver con lo que has aprendido de la experiencia, que con los años vividos.
Aprenderás que hay mucho más de tus padres en ti de lo que supones.
Aprenderás que nunca se debe decir a un niño que sus sueños son tonterías, porque pocas cosas son tan humillantes y sería una tragedia si lo creyese porque le estarás quitando la esperanza.
Aprenderás que cuando sientes rabia, tienes derecho a tenerla, pero eso no te da el derecho a ser cruel.
Descubrirás que solo porque alguien no te ama de la forma que quieres, no significa que no te ame con todo lo que puede, porque hay personas que nos aman, pero no saben como demostrarlo. No siempre es suficiente ser perdonado por alguien, algunas veces tendrás que aprender a perdonarte a ti mismo.
Aprenderás que con la misma severidad con que juzgas, también serás juzgado y en algunos momentos condenado.
Aprenderás que no importa en cuantos pedazos tu corazón se partió, el mundo no se detiene para que lo arregles.
Aprenderás que el tiempo no es algo que puedes volver hacia atrás, por lo tanto debes cultivar tu propio jardín y decorar tu alma, en vez de esperar que alguien te traiga flores. Entonces y solo entonces sabrás realmente lo que eres capaz de soportar; que eres fuerte y que podrás ir mucho más lejos de lo que pensabas cuando creías que no se podía más.
¡Es que realmente la vida vale cuando tienes el valor de enfrentarla!

jueves, 13 de mayo de 2010

MANOLO LAMAntable.

Hace ya tiempo que he perdido la costumbre de ver televisión varias horas al día. A menudo es para peor, porque termino desinformado de muchos temas de interés, pero por cosas como las de ayer, me alegro de dejar este recurso "informativo" a un lado.

Sentados a la mesa durante la comida. Las noticias de Cuatro en la cajita y vemos una novedosa forma de terminar un previo de una final futbolística. Manolo Lama, al parecer, no contento con la audiencia de la que hacen gala, se prepara una "sorpresa" mostrando su lado más gentil. "Quiero demostrar a España entera que la gente es generosa". El caso es que la cosa pinta bien al principio, tornándose burlesca a cada segundo que avanza. Cuestiono efusivamente las cualidades caritativas de dicho periodista y destaco la actitud del "personaje" que se situa a su izquierda. Sí, ese mismo. El de meticuloso peinado y zapatitos de charol. No contento con arrojar en un primer momento el móvil, termina el reportaje tirando una tarjeta (ambos objetos recogidos posteriormente), eso si, asegurándose antes de que está siendo grabado y poder pavonearse con sus amigotes de que ha salido en la tele haciendo el payaso.

Es muy triste hacer un circo de una desgracia. Y me atrevería a decir que una vez cerrada la conexión cada uno de los cafres que colaboran con el periodista en esta pantomima, recoge la limosna que ha tirado para figurar. ¿Quién nos asegura que no dejaron al mendigo con menos cosas de las que tenía? Estupenda imagen hemos dado los españoles en general y los atléticos en particular. Así dejaría yo su frase de presentación:

"Quiero demostrar hasta donde llega la estupidez humana cuando se enciende el piloto rojo de las cámaras".

La televisión me daba asco, me da asco. Es por eso que cada vez la veo menos. Y una vez más me reafirmo en mi postura. Vale ya de verduleras que juegan a ser periodistas, de periodistas que juegan a ser solidarios y de peliculeros que juegan a informar.



Dejando esto a un lado y a pesar de mi inexistente debilidad por el fútbol; enhorabuena al Atlético de Madrid.

martes, 4 de mayo de 2010

Viñarock DosMilDiez.

Ya llegó, ya pasó. Agradeciendo la vuelta a casa y el respeto que nos ha demostrado el tiempo, me pongo a recordar infinidad de cosas de nuestros cuatro días en Villarrobledo.

No puedo evitar sonreirme al recordar hazañas tales como el pijerío de Borja y Miguel, disfrutando de un festival "super", el momento chochín de Valero y Álvaro en medio de un concierto, las apuestas a piedra, papel o tijera que terminan con el sobaco de algunos socarrado a mechero o con el destelleante sonido de los Peta-Zetas en la nariz de otros. Todos recordaremos el que podría haber sido un video de primera de los de antaño. Nuestro amigo "Killer" sodomizando con cara de felicidad y el daño colateral que produjo. Caída de moto y acto sexual perruno, dos en uno. Los viajes nudistas de Miguel, con las bolsas de la compra colgando entre las piernas y la gente alucinando. Nuestro paso por la carpa Chillout o cada uno de los seres que pudimos conocer al abrir las puertas de los baños portátiles, como si de una prueba de "Humor Amarillo" se tratase. Podría seguir hasta el infinito menos uno, pero lo dejaré para disfrute durante la próxima vez que charlemos del Viña DosMilDiez.

Ahora es cuando voy a contaros los que para mí han sido las sorpresas musicales de este año. A modo de alineación, destaco como cantante a Aitor Ibarretxe (Lendakaris Muertos). Lo que hizo no tiene nombre. Tirarse en incontables veces sobre el público, dejándose llevar en volandas o a hombros adentrándose en la marea de gente. Guitarra; sin lugar a dudas Pablo García (Warcry). Al bajo me sorprendió, y de que manera, Javier Rojas (Mama Ladilla). Finalmente, no sé si por la "güeña" que llevaba encima, pero aunque no recuerdo al detalle cómo fue la actuación, sí me acuerdo de que a la batería me sorprendió el vertiginoso bombo de Roberto (Soziedad Alkoholika). Como actuación en grupo me gustó la de G5, aunque, evidentemente, es solo una de tantas.